«Te vamos a recordar siempre como una Adela luchadora»

La reciente muerte de Adela, vecina de Calera de León, ha caído por sorpresa y como un jarro de agua fría entre familiares, amigos y allegados. Ayer, su amiga María del Carmen Cubero, nos hacía llegar estas líneas que dedica con el mayor de los cariños a Adela y a toda su familia, con la esperanza de que las sienta allá donde esté. Dictan así:

Quiero dedicarte estas palabras que brotan en mi corazón:

Te has ido de una forma prematura e insospechada, de una manera injusta pero con las manos bien llenas de servir a todos. Aprendiste bien aquello que dijo Jesucristo "No he venido a ser servido sino a servir".

Dejas la plaza de Calera huérfana. En este último año han sido demasiadas las veces que ha enmudecido la plaza para decirle ¡Adiós! a vecinos muy queridos. Por desgracia en vuestra familia, ha tocado a dos preciosas rosas.

Pero no nos podemos venir abajo porque tú, no lo hiciste cuando también a los 54 años perdisteis a vuestro padre y tú tuviste el valor de ponerte, junto con tu madre y hermano al frente del negocio.

Te vamos a recordar siempre como una Adela luchadora. Este fatídico momento lo vamos a borrar de tu historia y yo al menos quiero recordar a esa Adela con la que he compartido muchos momentos accarreando agua de "la fuente arriba" con tanto brío. Y como no existía WhatsApp aprovechábamos los momentos de espera para enterarnos de los cotilleos.

 Esa sonrisa que tenías para todos cuando llegaban a tu bar y te preocupaba que todo estuviese bien.

 Va a ser muy difícil mirar el Bar de Inocente sin Adela, que siempre era Adela de Inocente cuando se te nombraba. Después llegaron a vuestra familia Ángel, tu marido, que con ese tesón parece como si siempre hubiese estado detrás de la barra. Y Dolores, las dos siempre juntas como dos buenísimas hermanas, siempre pensando y acompañandoos la una a la otra en lo bueno y en lo malo. Tendríais vuestras diferencias porque no hay dos personas que piensen igual. Pero nunca lo hemos notado. Siempre haciendo planes juntas: limpiando cada mañana el bar y la terraza. Haciendo cálculo, cuánto pavo y bacalao teníais que preparar con tiempo, etc.

 Cuidando a vuestra madre y tío siempre juntas.

Yo siempre decía Adela y Dolores y ahora me cuesta nombrar a Dolores sin Adela.

 Pero todos tenéis que ser fuertes, y tú, Dolores, que yo sé que puedes sacar fuerzas, a la cabeza de la familia, tienes que tirar del carro para que todo siga igual, como le hubiese gustado a ella.

 Vamos a recordar los buenos ratos que hemos vivido en la terraza. Siempre ponías un tono de humor a las situaciones ¡lo heredaste de tu padre! ¡cómo le gustaba a tu sobrino Pepe, cuando pequeño, beberse tu fanta! Su madre le reñía y te traía otra pero tú, tan feliz.

 Ahora vinieron a colmar la dicha de la familia esos dos tesoros: José Ángel y Rocío, que en tan poco tiempo, tanto has disfrutado.

 Y tú, vas a vivir siempre en el recuerdo de los que te queremos, de todos los calereños y visitantes.

 Cuando volvamos a saborear vuestras exquisitas tapas de guarrito, bacalao, pavo ...  no podremos evitar acordarnos de ti. Y a vosotros, familia ¡mucho ánimo! se lo debéis a ella que os ayudará desde el cielo.

       ¡¡Adiós Amiga!!    

María del Carmen Cubero Contreras