Rocío Sánchez deja boquiabierto al público monesteriense con sus ‘Sueños’ por una buena causa

Rocío Sánchez, presentaba este jueves en Monesterio su espectáculo flamenco,Sueños, un espectáculo que narra mi historia desde pequeña en el mundo del flamenco, nos cuenta la bailaora. Desde sus primeros pasos, hasta la actualidad, que se dedica profesionalmente a su enseñanza.

El vestuario, el atrezzo, la puesta en escena y el cambio de decorados, además del espectáculo de luces, conjugados con un arte mamado desde bien pequeña, Rocío puso sobre el escenario de la Casa de la Cultura su creación flamenca junto a sus compañeras de toda la vida: Inma Garrón, Irene Hernández, Ana Farrona, Rosa Moya y Lucía Sánchez, su hermana.

Además contó con un inmejorable acompañamiento: Ana Barba a la voz, Manolín García a la guitarra y Violeta al violín.

La monesteriense hizo viajar a las más de 300 personas que abarrotaron el auditorio por su historia, sus vivencias y sus Sueños por una buena causa, ya que el dinero recaudado con las entradas fue destinado a su primo Jesús Perera.

Recordemos que Jesús, es un pequeño monesteriense de 10 años que necesita constantemente actividades de estimulación para evitar el entumecimiento de su musculatura

Tras la magnífica puesta en escena de Rocío, que consiguió poner los pelos de punta, según nos confiesan algunos asistentes, tuvo lugar la entrega de cheques al pequeño Jesús para que pueda seguir costeándose su tratamiento.

Representantes de la AMPA Vía de la Plata del I.E.S. Maestro Juan Calero, le hicieron entrega de un cheque por valor de 2.000 euros, correspondientes a las 8 toneladas de tapones que llevan recolectando para Jesús desde el pasado mes de febrero. Unos tapones, que se seguirán recogiendo, ya que las intenciones de la AMPA es poder costearle a Jesús el tratamiento durante, al menos, dos años más.

Jesús también recibía otro cheque de 1.000 euros más, relativo al dinero recaudado con la venta de papeletas para el sorteo de una bicicleta. El número agraciado de este sorteo fue el 324.

Lourdes Sánchez, la madre de Jesús, una vez más volvió a expresar su infinito agradecimiento a todo Monesterio y demás pueblos de alrededor que se están volcando con su hijo. Tampoco se olvidó de todos los particulares, empresas e instituciones que colaboran desinteresadamente en la causa.