Las Misioneras de los Sagrados Corazones cumplen 25 años en el municipio

Las Misioneras de los Sagrados Corazones que, en la Diócesis de Badajoz cuentan con una casa en Monesterio, se encuentran este año de celebración por partida doble: por un lado celebran, los 125 años de la fundación de su congregación y, por otro, los 25 años de presencia en Monesterio.

Allá por 1991, tres misioneras, Jerónima, María y Bárbara, se establecieron en Monesterio. Su misión fue la educación en la fe, ser profesoras de Religión en el colegio.

Trabajaron en la acción social e integración en la parroquia. En estos 25 años, otras misioneras han trabajado en el instituto de Enseñanza Secundaria de la localidad y otras han dedicado su misión en la Pastoral de Enfermos, visitándolos y llevándoles a comulgar.

Actualmente, la comunidad está integrada por tres religiosas: Josefina, Tere y Peana. Ellas trabajan en la pastoral catequética y pastoral de enfermos.

En la parroquia se muestran muy agradecidas «al pueblo de Monesterio por su acogida, apoyo, cariño, comprensión y, de un modo especial, a las personas que todavía después de 25 años son las mismas de siempre».

Y es que, la congregación de los Sagrados Corazones fue fundada por Sebastiana Lladó Sala, en Campos (Mallorca) en el año 1891, donde ella había nacido y tomó el nombre de sor Mª Rafaela del Corazón de Jesús.

Según afirman las misioneras, «uno de los sueños de nuestra fundadora fue acompañar a las personas en el descubrimiento y crecimiento de su fe, especialmente entre las mujeres y niñas de su pueblo».

Llevada por este ideal, convirtió su propia casa en centro de espiritualidad.

Era entonces la casa diocesana de ejercicios de Mallorca, donde las mujeres que iban a tomar cualquier estado, vida religioso o matrimonio, hacían los ejercicios espirituales dirigidos por Sebastiana.

Tras una larga vida de búsqueda, queriendo ser fiel a la voluntad de Dios, a los 77 años de edad fundó la congregación de Misioneras de los Sagrados Corazones. Ella murió el 8 de marzo de 1899, en fama de santidad. Su carisma es contemplar, vivir y anunciar el amor del Padre manifestado en los corazones de Jesús y de María.

Las Misioneras de los Sagrados Corazones viven su carisma en un amplio abanico de sectores: educación de la fe, orientadoras de catequistas, acompañamiento, ejercicios espirituales, retiros, educación, sanidad, hogares escuelas, inserción en las parroquias y visitadoras de enfermos, entre otras acciones.

Para celebrar ambos aniversarios, la comunidad de religiosas en Monesterio ha preparado dos actos.

El 2 de junio está prevista la adoración eucarística para dar gracias por tanta vida en estos años.

Por su parte, el día 3, se celebrará la solemnidad del Corazón de Jesús, una celebración de la eucaristía centrada en este aspecto. A continuación, compartirán un café con dulces y un sencillo recuerdo de estos años de presencia en el pueblo.