Borrar
Una pareja de niños construye su robot CEDIDA
Casi un centenar de niños aprenden jugando en un taller de robótica

Casi un centenar de niños aprenden jugando en un taller de robótica

A través de la aplicación de diferentes disciplinas, los más pequeños construyeron sus propios robots, que más tarde controlaron con un ordenador

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Martes, 5 de marzo 2019, 16:56

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Los más pequeños de la casa han aprovechado este lunes de descanso, con motivo de las fiestas de Carnaval, para adentrarse en el mundo de las nuevas tecnologías, de una forma dinámica, gracias a un taller de robótica educativa.

Según apunta Making Robots, la empresa donbenitense que se encargó de impartir la actividad, la robótica educativa es una herramienta de aprendizaje que permite a los niños, en forma de juego, la aplicación de contenidos teóricos adquiridos de otras disciplinas como las matemáticas, la física, la mecánica, o la informática, entre otras. Unos contenidos que descubre a los más pequeños la aplicación de estas disciplinas en la vida real, haciéndoles asimilar de una forma más fácil su funcionamiento y aplicación.

Así, explican, «motivamos su entusiasmo por las ciencias y la tecnología, creando un entorno de aprendizaje basado en la experimentación, el autodescubrimiento y el trabajo en equipo y/o cooperativo. En definitiva, aprender jugando».

Fueron casi un centenar de niños de Monesterio, de la etapa de primaria, los que pudieron ser partícipes de esta experiencia, gracias a su puesta en marcha por parte de la AMPA 'El Llano' y la colaboración del ayuntamiento. Los talleres, de una hora y media de duración, se desarrollaron en una de las aulas de la Casa de la Cultura en cuatro turnos de mañana y otros cuatro de tarde, dada la alta demanda de las familias.

Los pequeños construyeron junto a otro compañero su propio robot, de un modo consciente, para más tarde programarlos con el ordenador y permitir su funcionamiento. Para ello, los monitores Jaime y Guillermo emplearon el método científico, que utiliza la teoría del ensayo-error, «asimilando que el error es una parte cotidiana en nuestra vida que nos hace ser mejores y crecer, perdiendo el miedo al fracaso».  Así, los niños aprendieron el porqué de las cosas, la razón por la que un objeto se mueve, o si, a partir de eso, se puede modificar o mejorar.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios